domingo, 29 de junio de 2014

La BIBLIOTECA del BOSQUE - de Miguel Ángel Blanco
























¿No es el arte, en cualquiera de sus acepciones, sino un intento de alcanzar la verdad? Aunque sólo sea un atisbo. Me resulta muy difícil distinguir entre la búsqueda de aquel hombre prehistórico encerrado en las cuevas de Altamira hace más de 15.000 años y la de un febril Goya plasmando sus pinturas negras en la Quinta del Sordo o la exploración de Miquel Barceló por las tierras de Mali. La manifestación artística se encuentra en el punto exacto donde confluyen mente y materia.  Una iluminación o un diálogo muchas veces doloroso, siempre fructífero.

No sólo los románticos tuvieron la urgencia de acudir a la naturaleza para experimentar una tempestad o un árbol donde prender su espíritu. Los impresionistas franceses necesitaron recorrer los campos para atrapar la luz. Siempre es un lugar en el mundo donde el espíritu se expresa.

Así que cuando encuentro a Miguel Angel Blanco (MAB), Premio Nacional de Grabado, componiendo su Biblioteca del Bosque, noto ese escalofrío del que se va a asomar a un lugar sagrado.
"Hace ahora treinta años que me retiré a los bosques del Valle de la Fuenfría, en la Sierra del Guadarrama, movido por la constatación de que la intensidad y la verdad de mi trabajo artístico dependían de la concentración y, especialmente, de la soledad y el silencio que sólo allí encontraría. La vida vegetal nos enseña que la muerte y el enterramiento son imprescindibles para el renacimiento. Yo quise germinar en los bosques."
En los libros de esta peculiar biblioteca vuelve a haber, como siempre, un diálogo: entre el hombre y la naturaleza, entre la materia y el espíritu, entre una voz telúrica y la modulación de un pensamiento. Este objeto físico y artístico es sin duda un libro, puesto que ha de abrirse; y al hacerlo perfila un relato que opera con herramientas procedentes de la pintura, la fotografía, el grabado y la escultura. Es una invocación. El "microcosmos del macrocosmos" que dijera el poeta Antonio Colinas.
"El bosque es uno de esos lugares privilegiados en los que se puede sentir la palpitación de la madre tierra. Es el punto en el que el cielo se enraíza en la tierra, un espacio sagrado cargado de misterios. Es, por tanto, un ámbito propicio para la creación artística. El hombre, como el árbol, busca allí el alimento necesario para el desarrollo del alma."

Libro nº 502      ACÍCULAS CELTAS          1.11.1992. 176 x 264 x 44 mm
6 páginas de papel de Nepal con estampación de sellos de hojas de pino


Caja con raíz de alcornoque, piedra, acículas del castro de Citania de Briteiros (Portugal) y círculo de madera quemada sobre cera
















Al principio de estos verdaderos artefactos, encontraremos siempre varias hojas de papel cuyas resonancias nos anticipan el fruto que guardan: un receptáculo protegido por un cristal donde hay una composición, de efecto hipnótico y calidad abstracta, realizada con objetos de un lugar en cuestión sean  los bosques del Guadarrama, la arenas de El Cairo o las piedras de Chiapas.
"El libro, instrumento por excelencia de transmisión de conocimientos, no está compuesto, en mi caso, de palabras. Es otro el lenguaje el que habla. Es el fragmento de naturaleza capaz de comunicar todo un mundo al que las palabras sólo pueden aproximarse. Invocaciones silenciosas. Todos los componentes de mis libros proceden de los reinos de la naturaleza, incluso la madera de las cajas y los distintos papeles -transformación sutil del corazón leñoso- de las páginas sobre las que dibujo. Los libros tienen, de hecho, una gran relación con el árbol, incluso terminológicamente, pues liber es también la parte viva de la corteza de éste. Las palabras, libro, liber, byblos, biblia, son sinónimos, y designan en botánica la piel del árbol, la corteza de la madera, el habitus, el revestimiento."
"El acontecimiento que se recoge o se recuerda en la caja es introducido por las páginas que la preceden. El sucederse de las páginas es asimilable al movimiento del alma al caminar, relación que otorga al libro un carácter dinámico. La elección del papel es muy importante, pues su textura y su color están ya hablando antes de convertirse en dibujos. Que el papel se adapte al material. He utilizado una gran cantidad de variedades de papel: desde el humilde de estraza al suntuoso de pergamino, pasando por el vegetal, los japoneses de kozo, los nepalíes de corteza de lokhte, los de caña de azúcar de la India, los tailandeses de fibra de morera y otros muchos. Las técnicas puestas en juego para la realización de los dibujos son también muy variadas: las aspersiones de tinta, las huellas positivas o negativas de materiales utilizados en la caja, las líneas de fuego, las marcas hídricas o distintas técnicas de grabado."


Libro nº 773      REGENERACIÓN EN EL MONTE ABANTOS       23.2.2000. 400 x 600 x 35
4 páginas con cenizas y óleo sobre papel reciclado

caja con cenizas del incendio de Abantos, piñas roídas por ardillas, raíces de pino, mineral, cuarzo, fósil de helecho, hierro fundido, escamas de piña y semilla de muérdago

















Para MAB la Biblioteca es un proyecto vital y está en continuo crecimiento. Constituye en sí misma un bosque vivo. El autor ve en los distintos formatos de los libros la escala variable de los árboles.

"La Biblioteca es un proyecto escultórico y vital, obra abierta a la amplitud de la naturaleza realizada con la lentitud y constancia con la que crece el árbol. Cada libro es una simbiosis entre el ángulo recto y la forma biológica. Comparto con el arte oriental el deseo de alcanzar una composición orgánica, en la cual lo lleno encarna la sustancia y el vacío garantiza la circulación de los soplos vitales. Uniendo así lo finito a lo infinito, como la propia creación. Tal vez, el fin de la obra sea entender el lenguaje secreto del cosmos, crear un gran misterio partiendo de una hebra de helecho o una gota de resina. Ser eco de lo efímero. Lograr la correspondencia con el universo y que el universo responda."


Estudio y Biblioteca del Bosque en Pinar del Rey, Madrid
















"Aún es posible sumergirse en la vida secreta de la naturaleza. La tierra exhala en no pocos lugares un aliento denso que, al ser respirado por el hombre, le insufla de forma inmediata conocimientos y sensaciones que ya poseyó antes, cuando vivía en su seno. La sensibilidad telúrica del hombre antiguo puede recuperarse todavía. Nuestra capacidad de profundizar en lo antiguo para descubrir lo nuevo. La naturaleza se presenta así como una experiencia trascendente, un medio para que el hombre rescate su grandeza oculta, para que crezca espiritualmente y penetre en lo oscuro."


Libro nº 669         CERES            21.5.1997. 134 x 309 x 30 mm
4 páginas de papel de grabado con gofrados de avena y cebada           
Caja con espigas de avena y cebada de Aguilar de Campoo y pintura blanca














"El bosque comunica un estado interior de serenidad, de pureza y de optimismo. Lo que allí ocurre, esos acontecimientos que pasan desapercibidos para los extraños, es siempre razonable, justo y definitivo. Ningún copo de nieve cae en el lugar equivocado."



Libro nº 740     FICUS RELIGIOSA            10.3.1999. 218 x 313 x 35 mm
Cuatro páginas de papel verjurado y papel pergamino con estampación digital del baño sagrado de Polonnaruwa, Sri Lanka

Caja con seis hojas del Ficus religiosa de Bodhgaya, árbol de la iluminación de Buda

"No es posible describir la experiencia de la participación en el misterio de lo natural. Mi obra, que surge toda ella de esa participación, no es explicativa: es una recopilación, en crecimiento continuo, de descubrimientos, de revelaciones, de invocaciones, de conjuros, de ceremonias rituales… conservados, VIVOS, en los libros-caja que componen mi Biblioteca del Bosque. Aunque he hecho diversos tipos de dibujos, esculturas y grabados, considero que mi creación más importante es la Biblioteca, comenzada en el invierno 1985 y compuesta en la actualidad por 1.130 libros-caja, en la que continuaré trabajando seguramente aún muchos años."


Libro nº 969    ZUGARRAMURDI AKELARRE     19.8.2005. 205 x 285 x 40 mm
Cuatro páginas de papel verjurado y papel de algodón con estampaciones vegetales y tinta china roja

Caja con tierra de la entrada a la cueva de Zugarramurdi y del interior de un roble seco, raíz de roble y corteza de castaño, roca calcárea erosionada por el Río del Infierno y frutos venenosos del Campo del Diablo, sobre parafina negra


"La caja es un pequeño santuario recóndito, un sancta sanctorum. Sellada con vidrio, hermética, para mantener sus contenidos, es arca, esenciario, relicario y crisol todo a un tiempo. Musgos, líquenes, cortezas, acículas, piñas, pólenes, zarzas, hongos, cera, raíces, tierras, minerales o resinas son algunos de los materiales que he recolectado. Materiales que liberan imágenes ocultas o latentes. Dentro de una pequeña caja pueden abrirse abismos insondables, vislumbrarse lagos profundos, espacios infinitos, tormentas, arroyos, fuegos… y hasta, a través de una gota de resina, la formación del Universo. Micropaisajes. El libro caja es la memoria de lo inmemorial. Pero nunca podremos abarcar la infinitud de la dimensión íntima."



Desde 1986 ha expuesto en la Biblioteca Nacional,  Fundación Lázaro Galdiano, Monasterio de Santo Domingo de Silos (en un Programa del Reina Sofía) y también en Huesca, París, Ostende y Tijuana. 
Historias Naturales en el Museo del Prado










Su último trabajo ha sido una intervención en el Museo del Prado titulada Historias Naturales. Un homenaje al origen del edificio neoclásico diseñado por Juan de Villanueva, que consistió en la instalación de 150 piezas de historia natural, procedentes del Museo Nacional de Ciencias Naturales del CSIC, junto a obras de la colección del Museo. La próxima muestra que podremos ver será en el Thysesen, en 2015, y versará sobre el paisaje típico del Lejano Oeste, Monument ValleySus exposiciones tienen nombres tan evocadores como Auguraculum, Musgo negro, Dendrologías, Sete lúas o La cabaña mística

Todas las citas y más información en La cabaña del Bosque.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.